Las sangre en el hielo

Con mis labios azules,
congelados por los latidos de la amistad,
yo grito mis sentimientos como puntas de hielo,
mientras cada pelo se me eriza entre cada mota de nieve.

La amistad la llaman mientras se congela,
como mi corazón cuando veo lo que se llama incertidumbre.

Un llanto man fuerte que las montañas
y mas ruidoso que los lobos,
consiguió que abriese mis ojos llenos de escarcha,
fría de tus manos inocentes.

Un pobre ángel que ayudo a un demonio seco,
que nada mas que las alas perdió tras sus ojos quemados,
desangrándose en el hielo
y su llama apagándose.

Un soplo es lo único que falta para que caiga este árbol quemado,
una triste caricia es lo que puede curar una puñalada,

pero nunca jamas podremos verlo en sus lágrimas ahogándose 

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