Noche empezada, noche oscura

En noche cerrada
se ocultan las estrellas,
y yo,
drogado de noches a tu lado,
busco tus matemáticas curvas
para sentirme vivo esta noche.

En silencio mientras vivo,
respiro,
inhalo tu humo de verdad mientras callo,
respiro y sigo,
callado, hundido entre lágrimas desdichadas,
encalladas.

Siento que vuelvo virgen a tus manos,
como enfermo de torturas,
enfermo de tu mal de amores.
Y tu eres mi profesora de magia negra,
enseñándome conjuros
que solo emergen de tu boca,
y que yo me empeño a buscar en tu ombligo.

Buscando por una gran ventana,
mas pequeña que tu corazón,
mas grande que tu alma,
ansia seca,
callada estas con los ojos completamente abiertos, sellados,
en una parte de ti que no tiene sentido,
mas que las ganas que tenemos de comernos a mordiscos.

Y tu, que no paras de decirme
que somos un caso perdido,
el pecado en estado puro,
la perdición perfecta
que sabemos que no necesita el otro.
Por eso se mi chute de las doce,
mi beso de buenos días
y mi polvo
con dosis de sadomasoquismo.

Mientras que la lluvia vuela,
renace en tus mejillas,
mejillas sonrosadas,
hermosa como el cielo,
mientras brilla el sol nocturno
y solo callamos entre nuestros labios,
buscando el siguiente beso,
volviendo a la primera premisa,
que seria volvernos uno,
entre tu y yo,

entre nosotros dos.

Comentarios

  1. Creado con un compañero escritos, Lírica, aquí su blog: http://tormentadeseptiembre.blogspot.com.es/

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