A corazón abierto
Separar
mis costillas,
para
arrancarte el corazón y cambiártelo por el mío,
pasándote
mil enfermedades,
cambiando
mil sentimientos,
volviéndome
solo artificial
frio
pero puro.
Todavía
respiro tus besos...
Aún
me quedan,
Pero
aún confío en volver a tragar el humo de tus puros rellenos de
carmín.
Comentarios
Publicar un comentario